Lecturas recientes, para los que llegan al día del libro sin muchas ideas:
Confieso que he comido de Miquel
Sen, 2015
Una sensata y reflexionada mirada a la gastronomía vivida. Desde un profundo
conocimiento Miquel Sen muestra un pasado reciente, ese en el que hemos crecido
algunos de nosotros, tan familiar unas veces como desconocido otras. La
familiaridad con los personajes protagonistas, colegas de profesión, compañeros,
alumnos, maestros, divos o gastrónomos ameniza la lectura haciéndola ágil. El libro regala momentos para la definición y el posicionamiento, para
la crítica y la intuición, para el desquite y la admiración. No tiene
desperdicio, admirable.
¡Qué poca crítica nos queda ya en este país!
Los discípulos de Baco de Daniel
García Giménez, 2014
El descubrimiento de la botella de vino más antiguo del mundo, las
falsificaciones de los grandes vinos, las bodegas de Aranda, templarios y
masones, la retórica de las catas de vino y Jean Leon el profeta. Por una
botella de vino mato. Una novela muy trabajada, madura sin complejos, de la
viña, de callejones oscuros impensables, iglesias y panteones. De aventuras,
misterio, detectives y asesinos.
“Recuerdo que comencé a madurar esta
historia cuando leí sobre un caso real de falsificación de una botella de vino
atribuida a Thomas Jefferson en elmundovino.com. Nunca pensé en novelar la
historia real, pero supe enseguida que su contexto permitía crear el escenario
de una ficción que reconstruyera el recorrido que podría haber seguido la esencia
del vino a través del tiempo y las personas.”
Comer sin miedo de JM Mulet, 2014
Un súper ventas, y no es para menos. Mitos, falacias y mentiras sobre la
alimentación en el siglo XXI. Si después de leerlo sigues creyendo en la luna
de Valencia, la dieta del pomelo y en las decocciones de cuerno de unicornio es
que no has entendido nada. De lectura obligatoria.
Una incursión en el mundo real de la cocina y de los cocineros pincelada de
ficción que no ha colmado las expectativas. El reclamo del título me llevo a
engaño, me dejé seducir al sentirme identificado pero dentro no encontré ni rastro
de las cocinas que he pisado. Si acaso una serie de miserias y pasatiempos propios
del mundo en el que vivimos, no exclusivamente de las cocinas.
La cocinera de Himmler de Franz-Olivier Giesbert, 2013.
Rose es una mujer increíble, la mujer que me habría gustado ser. Centenaria,
espabilada, sensual, valiente y generosa. La sentencia que abre el libro me
enamora por su contundencia y me engancha al libro, reza tal cual:
“No soporto a la gente que se queja.
El problema es que el mundo está lleno. Por eso tengo un problema con la gente.”
“Debo
decirles en primer lugar que no tengo nada de víctima. Por supuesto estoy, como
todo el mundo, en contra de la pena de muerte. Salvo si soy yo quien la aplica.
Y la he aplicado alguna vez, en el pasado, tanto para hacer justicia como para
sentirme mejor. Nunca me he arrepentido.”
El restaurante del amor recuperado
de Ito Ogawa, 2008
Un restaurante alejado, especial, en el que el acto de comer se convierte
en algo místico, cargado de sentimiento, algo milagroso, así sin más. Amistades
sinceras, fracasos sentimentales, amor fraternal… Todo muy Zen.
No hay comentarios:
Publicar un comentario