La pasada noche del jueves 25 tuve la ocasión de asistir a la cena realizada en la Torre Agbar de Barcelona con motivo de la presentación de las XVI Jornadas de Exaltación y Fiestas de la Verdura que se realizan en Tudela del 16 de abril al 2 de mayo. Invitado por Javier, alma del restaurante Sent Soví de Tudela, acudí a la cita. De la organización se ocupó Roser Torras.
En principio pasaríamos la velada juntos, compartiendo el servicio, charlando con el resto de cocineros venidos desde Tudela para mostrar sus preparaciones culinarias a base de verdura. Pero no fue así exactamente, a propuesta de los chicos, Maite, concejal de turismo del ayuntamiento de Tudela, se encargó de incluirme en la lista de invitados y así fue como finalmente me sentaba en la mesa. De repente me encontré rodeado de un nutrido grupo de empresarios y periodistas especializados. Estaba yo en mi salsa, como bien saben todos los que me conocen, me vuelvo hojiplático. Un cocinero metido a cronista entre la élite de la blogosfera no podía desperdiciar la ocasión. Una ocasión que tendría otra perspectiva aunque vimos, comimos y bebimos lo mismo. Allí estaban Txaber Allué, el Philippe Regol, Cristina-garbancita, Alberto, María Calabuig, gastronomía&cía entre otros, vaya panorama amigos.
L@s muchach@s de Tudela tenían varios retos: sobrevivir dos servicios en un cuchitril llamado cocina, improvisar, convencer a los gourmets y satisfacer las necesidades de la Orden del Volatín y del Ayuntamiento de Tudela. Cocina de recursos en estado puro. Brigada de camareros de “los que hacen bolos”. Planta 25 de la Torre Agbar, 21:30 hora zulú.
En los preliminares toda anécdota destensionaba los nervios, la descarga de los bártulos fue toda una hazaña, no cabía el camión y la seguridad del edificio mostraba sus más brillantes momentos cómicos. La Torre Agbar se mostraba como el magnífico escenario para sus platillos. Todo saldría bien, muy bien. Después del primer servicio llegó el merecido descanso, cenaron en El Coure, se relajaron y disfrutaron de su visita a Barcelona. Preocupados por las críticas, sabedores de las exigencias de los gourmets allí convocados.
Finalmente los 7magníficos se pasearon cual modelos por la pasarela, les hicieron compartir el estrado con el alcalde y salieron a recibir los aplausos. A los cocineros de Tudela les queda mucho camino por recorrer, pero los cimientos son buenos, su cocina conservadora, poco arriesgada, de corte tradicional y sin aspavientos. Caminan sobre seguro, algo imprescindible cuando se sale fuera a cocinar.
Un menú degustación a base de verduras tiene sus complicaciones pero cuando el producto es de una calidad excepcional tan solo son necesarias unas buenas manos para demostrarlo. Veamos el menú:
El producto es de primera, las habitas, cebolletas, ajetes, borraja, espárragos, alcachofas... todo tratado con mimo y esmero, con cariño.
Parafraseando a Éche o que ahi, si antes era un tocagüevos preferiría ser capador, pero me contengo, no se por cuánto tiempo, pero me contengo. Y hablando de huevos...
Tengo lo huevos pelados de participar en eventos de ese tipo, pero casi siempre desde el otro lado de la barrera, para mí, un lugar privilegiado, de manera que me posiciono siempre entre bastidores.
El encuentro de blogueros que se realizará con ocasión de estas jornadas promete ser un punto de encuenro interesante, intentaremos no perdernoslo esta vez y encontrar allí a nuestros amigos del mundi blog.
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Hey Xesco, soy el ayte. de Xavi aquí en Tudela, como digo yo el Galaico-Ribero (parafraseando a Pepe Rubianes), te leo recomendado por Xavi, mola un montón todo lo que pones y la caña que metes, eres de los míos... iré leyendo poco a poco tus recetas y las historias con que las acompañas para ir aprendiendo... si vienes por aquí ya nos veremos seguro y nos echamos unos vinos... te dejo mi e-mail en la dirección... mucho gusto en conocerte
ResponderEliminarHola David: Bienvenido, me alegra ser de los tuyos. Aquí tienes tu espacio para decir lo que quieras. Fue un placer conocerte, espero repetir por Tudela el mes que viene, por supuesto, nos echaremos unos vinos. Un saludo.
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